Significado De Chicle [ 2023 ]

Significado De Chicle

El chicle, ese pequeño y sabroso compañero de momentos relajados o situaciones que requieren un toque de dulzura. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cuál es el significado detrás de este pequeño deleite? En este artículo, exploraremos el fascinante mundo del chicle, desde su origen en la civilización maya hasta su proceso de producción actual. Descubriremos cómo el chicle ha evolucionado a lo largo de los años y su importancia en diferentes partes del mundo. ¡Acompáñanos en este viaje de sabor y tradición!

El Origen del Chicle

La Civilización Maya y su Uso del Chicle

La historia del chicle se remonta a la época prehispánica, cuando la civilización maya ya disfrutaba de sus beneficios. Los mayas utilizaban el chicle para limpiarse la boca antes de las ceremonias, aliviar la sed en épocas de sequía y aumentar la salivación. La palabra “chicle” proviene del vocablo maya “sicté ya’,” que significa masticar con la boca. Este simple acto se convirtió en una parte integral de su cultura y rituales.

La Producción del Chicle Moderno

De la Resina Natural al Producto Industrial

Hoy en día, la producción de goma de mascar ha evolucionado significativamente, alejándose de sus raíces naturales. La materia prima utilizada en la fabricación de chicle proviene de derivados del petróleo, marcando una diferencia radical con la tradición chiclera maya. Sin embargo, aún existen comunidades que luchan por mantener viva esta tradición y producir chicle de forma orgánica.

El Rol de Quintana Roo en la Producción

El estado mexicano de Quintana Roo es cuna del chicle, ya que es aquí donde crece el chicozapote, el árbol que proporciona la resina para su producción. En esta región se encuentra Tres Garantías, donde operan cooperativas como la de Manuel Pech Lugo, quien es la cuarta generación de una familia dedicada al chicle. La tradición chiclera es su herencia y forma de vida.

El Proceso de Extracción

Cosecha y Recolecta

La temporada de los chicleros de Tres Garantías comienza en octubre, después del período de lluvias. El proceso de extracción sigue siendo similar al que realizaban los mayas. Comienza con la limpieza de la maleza alrededor del árbol de chicozapote para facilitar el trabajo y espantar a los animales.

Obtención de la Savia

Luego, los chicleros realizan cortes oblicuos en la corteza del árbol, permitiendo que la savia fluya. Con habilidades adquiridas a lo largo de los años, trepan por el árbol y recogen las gotas de savia blanquecina que brotan.

Recolección y Rendimiento

Esta laboriosa tarea permite recolectar hasta 8 kg de resina por árbol. A cambio, los chicleros reciben alrededor de 70 pesos por kilogramo de resina, aunque esta cifra a menudo no es suficiente para sobrevivir durante las malas temporadas.

Producción de Chicle Orgánico

Después de la recolección, los chicleros transportan la resina hasta el campamento, donde se inicia el proceso de cocción. Antes de la cocción, la resina se filtra para eliminar impurezas. En grandes ollas sobre fuego fuerte, la resina se hierve y comienza a evaporarse. El chiclero debe mantenerla en constante movimiento para evitar que se adhiera. Cuando adquiere un color caramelo y una consistencia viscosa, está lista para enfriarse y moldearse. Finalmente, se le añaden sabores naturales para crear un chicle totalmente orgánico.

El Chicle Maya en la Actualidad

Hoy en día, la demanda de chicle orgánico ha encontrado un nicho en el mercado internacional. Japón es el principal importador de esta materia prima, mientras que Alemania lidera en el consumo de goma de mascar orgánica. Esto brinda un respiro a una industria dominada por la producción industrial de derivados del petróleo.

Conclusión

El chicle, que comenzó como una tradición maya, ha evolucionado y se ha adaptado a los tiempos modernos. Aunque la producción industrial ha desplazado en gran medida a la extracción manual de resina, todavía existen comunidades, como la de Tres Garantías en Quintana Roo, que luchan por mantener viva esta antigua tradición. La demanda de chicle orgánico en el mercado internacional es un rayo de esperanza para estas comunidades y su legado de sabor y cultura. El chicle, más que un simple dulce, es una parte de la historia y la tradición que perdura en el tiempo gracias a la dedicación de personas como Manuel Pech Lugo y sus compañeros chicleros.